martes, 25 de junio de 2013

UN MOZART DISTINTO, DIGNAMENTE PRESENTADO

Wolfang Amadeus Mozart: “Il Sogno di Scipione” Opera en un acto. Dirección de Orquesta y Coro: Camilo Santostefano. Dirección de Escena: German Ivancic, Realización Visual: Cecilia Magno, Realización de Iluminación: Cristian Domini, Vestuario: Virginia de los Santos. Elenco: Gabriel García (Scipione), Hernán Crida (Scpione Actor), Selene Lara (Constancia), Patricia Villanova (Fortuna), Alejo Ruíz (Emilio), Pablo Urban (Publio), Flavia Memmo (Licenza). Coro y Orquesta de Lírica Lado “B”. Espacio Hasta Trilce (23/06/13).

  
Quienes venimos siguiendo las propuestas de Lírica Lado B desde el no tan lejano “Don Quijote en las Bodas de Comacho” hasta la actualidad, aguardamos con natural expectancia cada nueva presentación con el propósito de verificar si, como sucede siempre, se tiene alguna nueva sorpresa en cuanto a la estética que nos proponen y descubrir algún título nuevo que acreciente nuestro conocimiento y nos sumerja en el mundo de cada compositor abordado. Y hete aquí que llegamos a un Mozart distinto, absolutamente infrecuente. “Il Sogno de Scipione” fue el título elegido y su presentación  más que digna en virtud del esfuerzo que ha significado para los jóvenes y entusiastas emprendedores ingresar al universo del genio Salzburgués, obteniendo por ello un interesante resultado. Montada dentro de un espacio poco convencional como la sala Hasta Trilce, el escenificar el sueño en el que se halla sumergido el romano Escipión , la influencia de las diosas , su padre y su abuelo, todos en el más allá,  y su sobresaltado despertar, significó todo un desafío del que German Ivancic, que hacía sus primeras armas como Director de Escena, salió a mi juicio muy bien parado. Ambientarlo en un contexto delirante, acorde al sueño, dentro de un geriátrico en cuyo jardín se desarrollan las escenas, doblar al protagonista, con un actor llevando los movimientos y un cantante desde un costado sobrellevando la parte vocal hasta el despertar de la pesadilla en que pasa a integrarse a la escena, habla a las claras de conceptos teatrales muy sólidos, cumplimentados con un reparto donde todos demostraron sólidos recursos actorales. Sumémosle la ambientación efectiva con elementos de jardinería  que realizó un equipo encabezado por Cecilia Magno y la buena iluminación aportada en este caso por Cristian Domini para que lo visual haya sido, sin dudas, muy interesante. Para cerrar lo teatral , quiero destacar el trabajo de Hernán Crida a quien le cupo personificar al protagonista actoralmente. Fue impresionante, tanto desde la entrega física como lo gestual. Bien marcado, movimientos precisos, gestualidad impecable. Muy sólido. En la parte vocal, las voces femeninas marcaron el rumbo. Patricia Villanova, una voz a la que escuché por primera vez,  realizó una notable recreación de la diosa Fortuna.  Timbre muy grato, muy segura, afinación impecable, debe seguir en ese rumbo. Una vez más Selene Lara mostró sus cualidades en el escenario. Soltura, oficio, canto impecable. En el final, haciendo su entrada como una diva, Flavia Memmo realizó una  correcta faena como la Licenza, aunque sin llegar al nivel superlativo de sus dos colegas mujeres. En las voces masculinas, Gabriel García como el protagonista tuvo altibajos notorios, si bien en la zona aguda mostro  pasajes notables, por momentos su labor se vio superada por la masa orquestal. Alejo Ruíz como Emilio y Pablo Urban lucieron en lo actoral, menos destacadas fueron las partes vocales. Camilo Santostefano propuso una interesante lectura de la obra,  aunque a veces la orquesta y el coro le jugaron alguna mala pasada, sin embargo su empeño posibilitó que todos llegaran a buen puerto y el público, en el que cada vez más se aprecia a habitués del Colón, rubricara con un aplauso sostenido el esfuerzo.

 

DONATO DECINA

No hay comentarios:

Publicar un comentario