Concierto a
Cargo de la Orquesta Sinfónica Nacional: Director Invitado: Guillermo Becerra,
Solísta: Gustavo Mulé (Violín). Programa: Mussorgsky: “Una Noche en el Monte
Calvo”, Kabalevsky: Concierto para Violín y Orquesta Nº 1, Rimsky Korsakov: “La
Gran Pascua Rusa”, Borodin: Danzas Polovsianas de la opera “El Principe Igor”.
Bolsa de Comercio de Buenos Aires 14/03/04.
Luego de un
promocionadísimo paso por la Villa 31 de Retiro, en donde se
interpretaron, entre otras cosas, las dos obras finales que aquí se ofrecieron,
la Sinfónica inicio, como todos los años, su pretemporada en el viejo y
legendario recinto de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires que desde 1983 le da
cobijo. Un temporal de lluvia y una Huelga de Colectivos suburbanos conspiró
contra el espectáculo. Platea raleada hasta en las ubicaciones destinadas a los
socios de la institución y, colofón, la necesidad de procurar transporte movió
a los organizadores a replantear la programación, suprimiendo de la misma la
única obra argentina de programa que era la serie argentina de Gilardo Gilardi. Esperemos su reprogramación
inmediata. La sesión fue confiada a Guillermo Becerra, garantía de confianza
quien mostro dotes de saber muy bien su oficio. Como Director a cargo de una
banda, la que toca en diferentes espacios, le vino como anillo al dedo para
ajustar muy bien el sonido del conjunto en el recinto, sín desacoples ni estridencias y luego su sabiduría como
concertador. La equilibradisima versión de “Una Noche en eMonte Calvo” de Mussorgsky con orquestación de
Rimsky-Korsakov, nos mostró a una cuerda ajustadísima y una excelente sección
de vientos que aquí ofreció lo mejor de si misma. Parrafo aparte merece el
Concierto para Violín y Orquesta Nº1 de Dimitri Kabalewsky, que tuvo en Gustavo
Mule a un interprete muy consumado e inspirado, quien dio en la tecla con buen tempi y fina
sensibilidad. La parte final nos mostró una vibrante versión de “La Gran Pascua
Rusa “ de Rimsky-Korsakov, ajustada hasta en los mínimos detalles y un cierre a
pleno con las celebres Danzas Polovsianas de la Opera “El Princpe Igor”, que
mostró al Director en su mejor faceta, obteniendo en todo momento la respuesta
equilibrada del conjunto. Valió la pena arriesgarse a ir con el temporal, la
Sinfónica retribuyó con creces.
Donato Decina
No hay comentarios:
Publicar un comentario